Una acción que fideliza puede ser tan sencilla como invitar un café. ¿Quién no prefiere un local donde le invitan al café? ¿Te llevarías a un amigo? Exacto.
Identificar las veces que un cliente vuelve es sencillo si lo haces digitalmente. A través del wifi, de la lectura de un QR, al pedir online… Cada vez que tu cliente cumple con un hito que te interese a ti, le invitas a un café. El coste de esta acción son pocos céntimos, pero la satisfacción de tu cliente no tiene precio.